ZAPATILLAS BLANCAS HOMBRE
La última tendencia en calzado casual son las zapatillas blancas hombre y las de Recykers son tu mejor opción. ¿Por qué? Son comodísimas, versátiles, con carácter y no pasarán desapercibidas nunca, ya que cuentan con su propio estilo.
En nuestra tienda online podrás encontrar gran variedad de zapatillas blancas que busca todo el mundo. Tenemos estilos más básicos para la oficina que no te querrás quitar nunca, porque quedan genial con camisas y con esos pantalones que has adjudicado ya “para entre semana” o “para el trabajo”. Y también tenemos estilos para darle un rollo muy guay y casual a tus looks de fines de semana.
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¿Por qué tener un par de Sneakers Blancas Hombre?
Tanto en la moda sostenible como en el fast fashion unas buenas zapatillas blancas para hombre son todo lo que necesitas en tu zapatero. Este estilo ha dominado y domina las pasarelas de todo el mundo, y lo llevan desde los jóvenes líderes de la moda en las alfombras rojas hasta para llevar un look chic por la calle.
Y es que, aunque algunos están confundidos, las sneakers blancas no tienen nada que ver con la típica zapatilla para correr o de gimnasia. Sino que es un modelo de calzado más elegante y limpio. ¿Y lo mejor? Su versatilidad.
Las zapatillas blancas, tanto de corte bajo como un estilo botín, tienen una infinidad de posibilidades dentro de los outfits masculinos y te salvan de casi todas las situaciones. Así que sí, necesitas un par de zapatillas blancas hombre, y sí, tienen que ser de Recykers.
CÓMO COMBINAR ZAPATILLAS BLANCAS HOMBRE CON UN ESTILO CASUAL
El icono Steve McQueen dio el pistoletazo de salida a la zapatilla blanca y autorizó a los hombres de los años 50 a llevarlas con pantalones chinos de algodón y un polo, eso sí: sin calcetines. Los toques deportivos de la zapatilla de tenis blanca de lona confieren una estética de club de campo al look que todos conocemos. Esos pantalones color hueso o caqui recortados y una camiseta en tonos pastel o algo más náutico como una camiseta a rayas marineras y blancas. Pero ¿cómo podemos combinar este tipo de sneakers hoy en día? Pues existen multitud de outfits con los que conseguir un look casual:
ZAPATILLAS BLANCAS HOMBRE CON PANTALONES CORTOS
Los pantalones cortos son la opción más obvia para las zapatillas y más cuando se acerca el verano, pero también puede que sea el look más complicado de combinar. ¿Por qué? Porque los pantalones cortos y las zapatillas pueden parecer más dignos de un gimnasio que de un conjunto casual de verano perfectamente estilizado. Es por eso que aconsejamos llevar una zapatilla blanca más delgada y fina con caña baja y sin calcetines.
ZAPATILLAS BLANCAS HOMBRE CON VAQUEROS NEGROS
Entrando de lleno en la tendencia minimalista que barre la ropa de los hombres en este momento, las zapatillas blancas son una opción fácil para los fans de los looks con vaqueros negros.
Si utilizas el color negro habitualmente en tus outfits te habrás dado cuenta que por si sólo este color se vuelve el proganista del propio look. Por eso aconsejamos que si quieres llevar sus bambas blancas con estos conjuntos no los recargues demasiados. Utiliza toques minimalistas como no llevar calcetines. Y si quieres llevar chaquetas, camisas abiertas o abrigos que sean muy simétricos. Y si es verano siempre puedes optar complementando el look con una gorra o con joyas metálicas para darle un rollo diferente a tu estilo.
ZAPATILLAS BLANCAS HOMBRE CON PANTALONES CHINOS
Los pantalones chinos se han convertido en una de las opciones más codiciadas en la moda masculina. Eso sí, para llevar estos looks tienes que tener una predilección por las siluetas más holgadas. Una de las combinaciones más populares con los chinos es un look que te se pueda llevar desde por la mañana hasta la noche y que sigas estando perfecto.
Escoge un chino anchito y combínalo con una sudadera o una chaqueta informal junto con una camiseta básica. Si ésta es blanca quedará muchísimo mejor con el calzado. Y puedes fusionar esta combinación con una chaqueta de cuero sintético y puede que algún colgante de cadena.
ZAPATILLAS BLANCAS HOMBRE CON SKINNY JEANS
Otro de los looks clave para cualquier temporada son tus skinny jeans con sneakers en color blanco. Puedes conseguir un look más tipo “ropa de trabajo americana” con un denim recto y enrollando los puños a lo Paul Newman.
Y si buscas un outfit más chic deja de lado la típica chaqueta vaquera y opta por un abrigo y una camiseta con cuello. Puedes recurrir al tejido chambray para alinear los colores y mantener la tonalidad de look. Unas buenas Recykers blancas y tienes un look de otoño-invierno perfecto para cualquier temporada u ocasión.
ZAPATILLAS BLANCAS HOMBRE Y LOS TRAJES
Mientras que la sastrería es un mundo aparte en la moda de caballero, la estética de las zapatillas de deporte blancas con los trajes es un nuevo movimiento que a todo el mundo le gusta muchísimo. Con un traje o una blazer, la zapatilla añade un aspecto informal sin esfuerzo a un conjunto de sastrería perfecto para las noches de fiesta. O, incluso dependiendo del color del conjunto, para el día.
Con un traje más elegante, sobre todo si llevas complementos como corbata, pañuelo de bolsillo y chaleco. Para ello puedes probar con la colección Vesterbro.
Eso sí, si vas a probar con este tipo de looks la regla que siempre debes seguir para no estropear tu conjunto es que las zapatillas estén perfectamente limpias. Sabemos que un toque “usado” puede incluso quedar menos en ciertos outfits. Pero los trajes no son el caso.
La historia de las zapatillas para hombre en color blanco
A medida que los ciclos de las tendencias giran, elementos tan básicos como unas gafas de sol pueden quedar repentinamente fuera de la moda. Sin embargo, mientras muchísimas modas van y vienen, una de las piezas clave en los estilismos masculinos que perdura y perdurará son las zapatillas blancas de caña baja.
Sea cual sea la estación en la que te encuentres, este tipo de sneaker está en el top del calzado. Es ligera, refinada y versátil a más no poder. Pero ¿cuál es la historia de esta zapatilla?
Para entender realmente lo que hace que la zapatilla de tenis de caña baja sea tan icónica, tenemos que empezar por el principio. En la Inglaterra de 1870, una revolucionaria zapatilla de lona/caucho comenzaba a causar furor. Las denominadas “plimsolls” (apodo obtenido por el parecido a su puntera de goma con la línea Plimsoll de un barco) representaban una cruda solución a un problema generalizado. Porque mientras que los tradicionales derbies deportivos con suela de cuero funcionaban bien en condiciones ideales, las suelas de goma vulcanizada introducidas por Charles Goodyear a partir de la década de 1830 eran más baratas y más adaptables a casi todo tipo de deportes.
Así que, de esta forma tan sencilla y económica, las zapatillas blancas hombre comenzaron su historia en el mundo deportivo. Y así fue como comenzaron a coger popularidad gracias a su comodidad y fiabilidad.
A principios de la década de 1890, los ejemplos de “zapatillas” deportivas británicas habían ganado la suficiente popularidad en Estados Unidos como para fomentar la primera producción de zapatillas estadounidenses. Sin embargo, no sería hasta 1917 cuando la primera zapatilla de lona llegaría al mercado de masas de las tiendas.
Los años de entreguerras no trajeron consigo muchos avances importantes en el calzado en sí. Pero un nuevo enfoque en la cooperación internacional proporcionó un nuevo escenario para las zapatillas blancas hombre: los Juegos Olímpicos. Aunque el tenis desapareció del programa olímpico en 1924, se pusieron en circulación suficientes zapatillas de deporte como para que se convirtieran en el calzado preferido de todo el mundo del atletismo. Esta notoriedad internacional hizo que las zapatillas blancas de caña baja se convirtieran en un símbolo de cultura y en una señal de ropa deportiva.
Antes de que finalizara la década de 1930, las zapatillas deportivas habían pasado de ser una curiosidad a ser el estándar de oro. La creciente popularidad del baloncesto estadounidense fomentó nuevos desarrollos tecnológicos, pero la humilde zapatilla blanca baja continuó siendo la zapatilla número uno.
Durante la siguiente década, el desarrollo de este calzado pasó a segundo plano ante necesidades industriales más urgentes. Sin embargo, después de la Segunda Guerra Mundial, el comienzo de un boom económico en EE.UU. proporcionó a los padres jóvenes y a los niños del “baby boom” oportunidades de ocio sin precedente. En esta sociedad, los códigos de vestimenta se relajaron y empezó a tomar forma el estilo que ahora llamamos “athleisure”: zapatillas deportivas, camisetas y ropa hecha para la comida y el movimiento. No obstante, a lo largo de este periodo de grandes cambios, la zapatilla de tenis blanca permaneció relativamente igual.
En la década de 1960, la primera moda deportiva del mercado masivo se impuso. El “boom del tenis”, como se conocería más tarde, fue un entusiasmo e histeria a partes iguales. De repente, millones de personas de todo el mundo querían ir a las pistas. Pero, antes de hacerlo, cada uno necesitaba el atuendo adecuado, y ahí entraban las zapatillas blancas hombre.
Con el boom del tenis en pleno apogeo, los fabricantes de calzado deportivo tuvieron por fin la demanda del público necesaria para buscar la innovación. En un deporte tan ágil como el tenis, las zapatillas de lona ofrecían poca capacidad de respuesta a los jugadores que corrían por la pista. Por lo que cambiaron los materiales, pero manteniendo la misma estética que tanto gustaba al público. Y, a finales de la década de 1970, las zapatillas blancas eran un elemento de estilo cultural, tanto para hombres como para mujeres.
Puede que los avances posteriores en la tecnología de los materiales hayan despojado a las zapatillas bajas blancas de su función deportiva. Pero en el mundo de la moda siguen siendo todo un hito. Por eso comprar cualquier de nuestras zapatillas blancas hombre de Recykers van a ser una compra segura para tu armario. Pues que no sólo te durarán para muchísimas temporadas, sino que nunca pasarán de moda.